Si bien la oferta turística intenta adaptarse a las nuevas demandas y los diferentes nichos emergentes, a veces la innovación hotelera se adelanta a éstas y crea nuevos tipos de complejos para gustos muy particulares.

¿Se imagina alojándose en hoteles cueva, suites en minas, casas trogloditas o en termas romanas, por ejemplo?  Ya es posible en diferentes países del mundo.

• En Suecia han reformado una antigua mina situada en el condado de Västmanland, para convertirla en un hotel con suites a 155 metros bajo tierra.
•  Capadocia, Turquía cuenta con un hotel – monasterio, una villa en la que las casa habían sido excavadas en las rocas y que eran utilizadas por antiguos monjes. El establecimiento que cuenta con 54 habitaciones está situado sobre una colina.
• Un hotel de tres estrellas en el casco antiguo de Matera (Italia), que servía antiguamente como vivienda de los monjes franciscanos, homenajea a los baños que se realizaban en el Imperio Romano y cuenta con piscina, hidromasaje, ducha, sauna seca y baño turco.
• Marhala es un hotel en Matamata, Túnez, es un complejo de 70 habitaciones excavadas por los bereberes. Conservan intacta la estructura de la época, por lo que los aseos son compartidos, además, en su restaurante se puede disfrutar de comidas típicas árabes.

Estos establecimientos son ideales para turistas aventureros, interesados en poder disfrutar de una estancia diferente y de un entorno único.

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