Hay muchas personas que desafortunadamente siguen viviendo peor que muchos animales de zoológicos”, asegura Javier Almunia, doctor en Ciencias Marinas y presidente de la Asociación Europea de Mamíferos Acuáticos (EAAM), en una entrevista en exclusiva para Tourinews. Javier Almunia, que también es presidente de la Asociación Ibérica de Zoológicos y Acuarios (AIZA) y director de Loro Parque Fundación, explica que lo fundamental para los animales en cautividad es “tener un buen enriquecimiento ambiental” y que los zoológicos cumplen una labor científica “fundamental” que facilita el estudio y entendimiento de las especies.
 

Pregunta (P): En cuanto a las condiciones de los animales en cautividad, ¿cómo se determina cuánto espacio necesita un animal en cautividad?

Respuesta (R): Hay muchísimo debate con la cuestión del espacio, incluso dentro de los propios técnicos. Solamente en el caso del delfín mular, la Asociación Europea de Mamíferos Acuáticos ha desarrollado unos estándares en los cuales se establece el volumen y la superficie que necesitan. Y realmente no lo hemos hecho por una cuestión de bienestar animal, sino por la percepción del público. Lo que nos dice la ciencia es que, para los animales, lo más importante es tener un buen enriquecimiento ambiental y que sus entrenadores y cuidadores se ocupen de que estén entretenidos, con retos psicológicos.

EAAM

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P: Pero a la hora de dimensionarlo, ¿se puede ser más o menos generoso con relación al espacio para los animales?

R: Por supuesto que sí, pero el espacio es una cuestión percibida. El bienestar animal es otra cosa y hay muchos otros elementos que influyen en él. El tamaño del sitio solo influye cuando es muy muy pequeño. En ese momento puede llegar a influir negativamente, sin embargo, a partir de un tamaño mínimo, por más que amplíes el tamaño, no vas a conseguir mejorar el bienestar.

P: Y el espectáculo en sí, ¿es bueno para el animal? ¿Forma parte de su ejercicio diario?

R: Desde el punto de vista del animal, la realización de ejercicio es fundamental. Los animales en los zoológicos no tienen que estar buscando comida todo el tiempo, que es lo que ocurre en la naturaleza, por lo que tenemos que aportarles ejercicio para que se mantengan en buena forma. Además, lo que reflejan los estudios científicos es que el animal presenta muchas menos hormonas de estrés antes y después de las presentaciones. Es decir, para los animales es un elemento que les relaja.



 

P: Cada vez más, los zoológicos y acuarios mezclan actividades de ocio con la investigación científica y la educación. ¿Dónde está el equilibrio de cada función? ¿Que las personas acudan a los zoos es lo que permite obtener ingresos para investigar?

R: Sí, indudablemente. Hay zoológicos con un enorme interés por la ciencia, la educación y la conservación, pero su estado financiero no les permite desarrollarlo. El caso del Loro Parque es un claro ejemplo de que un centro con un gran éxito turístico puede financiar hasta 25 millones de dólares para la conservación y la naturaleza. Este dinero es transferido a las ONGs que están en todo el mundo conservando las especies más críticamente amenazadas. Eso, por mucho que ese interés exista, si no hay un éxito financiero que lo pueda permitir, nunca se va a poder llevar a cabo.

P: ¿En qué consiste la labor científica de un zoológico?

R: En poner a disposición de la ciencia todos sus animales. En este caso, tener animales entrenados es una enorme ventaja porque el investigador puede completar, en una semana, un trabajo que en el mar sería imposible y que con animales sin entrenar costaría meses o años. Esto es un avance para la ciencia absolutamente extraordinario y por eso somos un recurso fundamental. De hecho, hay un manifiesto firmado por 160 científicos de todo el mundo en el que manifiestan la importancia de poder tener cetáceos bajo cuidado humano para poder seguir haciendo ciencia.
 

Nuestro deseo es que todos los animales disfruten de un nivel de bienestar equivalente, pero hay países que no se lo pueden permitir"

 

P: ¿Por qué existen diferentes legislaciones sobre el bienestar animal, según los países o los continentes?

R: Evidentemente, nuestro deseo es que todos los animales disfruten de un nivel de bienestar equivalente, pero hay países que no se lo pueden permitir. En una reunión de la Asociación Mundial de Zoológicos y Acuarios, un director de un zoológico indio planteaba que, si los primates de su zoo disfrutaran de unas condiciones equivalentes a las que tenemos en Europa, habría muchos de sus visitantes que querrían entrar dentro del recinto, porque su condición de vida es peor. Es decir, vivimos en un mundo con mucha desigualdad y hay muchas personas que desafortunadamente siguen viviendo peor que muchos animales de zoológicos.

P: ¿Los zoológicos también colaboran en el rescate y la recuperación de animales heridos en la naturaleza?

R: Sí, nosotros estamos a completa disposición de las administraciones competentes. En este caso, afortunadamente, el Cabildo de Gran Canaria tiene un centro de rescate de fauna extraordinario, con una capacidad para mantener animales marinos probablemente de las mejores de España. En ese sentido, nuestra ayuda es mucho menos necesaria, pero siempre estamos dispuestos a colaborar, ya sea para ponerle un transmisor a una tortuga marina o cuando aparecen animales completamente exóticos.

 

*Este artículo forma parte de una entrevista dividida en cuatro fragmentos.