La llegada de Donald Trump al Gobierno de Estados Unidos ha cambiado completamente las reglas del juego, incluso para los viajeros. Además del endurecimiento de los controles en las fronteras, que ha provocado deportaciones e incluso detenciones de turistas europeos, ahora se suma una nueva norma que, de no cumplirse, también puede suponer penas de cárcel.

Este nuevo requisito está relacionado con el registro USCIS, es decir, en el Servicio de Ciudadanía e Inmigración. Se trata de un formulario que, desde el 11 de abril, tienen que rellenar todos los ciudadanos no estadounidenses mayores de 14 años que vayan a permanecer más de 30 días en Estados Unidos o aquellos que no hayan proporcionado sus datos biométricos a la hora de solicitar la visa. 

Una vez cumplimentado el formulario, el USCIS emitirá un ‘Comprobante de Registro de Extranjero’, que se deberá portar en todo momento durante la estancia en el país, independientemente del motivo del viaje.

Duras sanciones
 

Según han anunciado desde el Servicio de Ciudadanía e Inmigración, quienes no lleven la evidencia de registro en la calle podría enfrentar duras sanciones, al considerarse un delito menor federal 

Entre las posibles sanciones se incluyen multas de hasta 5.000 dólares estadounidenses o penas de cárcel de hasta seis meses. También pueden darse ambos castigos simultáneos.

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