Una decena de osos polares ha invadido las áreas residenciales del archipiélago de Novaya Zemlya, ubicado en el ártico de Rusia, en busca de comida. Incluso, se han podido ver a estos animales entrando a las casas o buscando alimentos en los basureros.

Dada la gravedad de la situación, las autoridades locales decretaron el estado de emergencia el pasado sábado, 16 de febrero. A su vez, Moscú ha enviado un equipo de especialistas hasta el archipiélago, para sedar a los osos y trasladarlos a su hábitat natural.

A este respecto, el responsable adjunto de Novaya Zemlya –con una población de aproximadamente 2.500 habitantes-, Alexander Minayev, aseguró que los osos habían atacado a las personas y que se habían adentrado en los edificios. “La gente tiene miedo. Los padres tienen miedo de que los niños vayan a la escuela”, aseveró.

Según ha informado El Confidencial, los habitantes de Novaya Zemlya han intentado ahuyentar a los osos tocando el claxon de los coches o con perros, pero todos los intentos han sido en vano. Cabe destacar, que Rusia prohíbe disparar a estos animales, debido a que se encuentran en peligro de extinción. Sin embargo, algunos creen que esta es la mejor opción, si la misión del equipo de especialistas falla.  

Cambio climático

Se cree que este comportamiento de los osos polares, alejarse de su hábitat natural en busca de comida, está directamente relacionada con el cambio climático.

Según ha informado Publimetro, Liz Greengrass, directora de la organización benéfica de conservación animal Born Free Foundation, manifestó: “Los osos polares dependen de las focas para alimentarse y las focas dependen del hielo marino. El calentamiento global está derritiendo el hielo y provoca una reacción en cadena sobre la supervivencia” de estos animales.