El grupo ecologista Greenpeace amenaza con demandar judicialmente al gobierno de Países Bajos si no paraliza las ayudas a la aerolínea nacional KLM. Desde la ONG denuncian que la línea aérea está recibiendo apoyo económico estatal pese a que su política ambiental es inadecuada.
Según informa On the wings of Aviation, el gobierno de Países Bajos defiende que acudió al rescate de la que es una de las mayores empresas del país y que más beneficios e ingresos aporta, mientras que las asociaciones ecologistas critican que es la más contaminante, puesto que opera sin un plan de acción climática que reduzca el impacto de los vuelos.
Desde Greenpeace han dado de plazo al gobierno neerlandés hasta el 1 de octubre para sentarse con el fin de abordar la cuestión. Plantean que, al igual que ha hecho Francia con AIr France, se impongan condicionantes relacionados con la política ambiental para que la empresa pueda obtener el rescate estimado en 3.400 millones de euros, de los que 2.400 serán prestados por 11 bancos y avalados por el Estado, mientras que las arcas públicas aportarán otros 1.000 millones de euros.
