La pasión por el deporte puede llegar a límites insospechados. Justo es eso lo que ha pasado en Hawái (EE.UU.) con un grupo de golfistas. A pesar de la proximidad del activo volcán Kilauea, el juego no se detiene.

Fotos tomadas en la Isla Grande y publicadas por CNN, muestran el aplomo de estos jugadores que golpean las pelotas de golf, indiferentes ante la enorme columna de ceniza a sus espaldas.

La erupción de este coloso hawaiano ha destruido casas, causado evacuaciones y amenaza con provocar estragos en la industria turística.