El Gobierno de Zimbabue ha declarado la emergencia sanitaria por la epidemia de cólera que sacude al país desde el jueves de las semana pasada. Desde entonces, han fallecido 20 personas en la capital, Harare, mientras que 2.000 presentan síntomas de la enfermedad.

Según ha informado El País, el origen de la epidemia radica en el consumo de agua contaminada. Y es que, algunas poblaciones de los suburbios de Harare carecen de agua corriente, por lo que extraen agua de pozos comunitarios o excavados por ellos mismos. El brote, que vino acompañado de fiebres tifoideas, comenzó cuando las alcantarillas de los barrios Budiriro y Glenview se desboradaron, contaminando dichos pozos.

El Gobierno ha decidido clausurar estos puntos de agua, así como suspender las clases en las zonas afectadas. También, ha solicidado ayuda a las Naciones Unidas y a las empresas privadas de suministro de agua. Mientras, en el hospital de enfermedades infecciosas de Beatrice Road, ubicado en Harare, se han dispuesto tiendas de campañas para prestar atención médica a los enfermos.

El cólera es una enfermedad infecto-contagiosa intestinal aguda que se genera por la ingesta de alimentos o aguas contaminadas por la bacteria Vibrio cholerae, provoca vómitos y diarreas intensas que pueden derivar en deshidratación. Esta afección es uno de los 14 problemas que más preocupan a la Organización Mundial de la Salud (OMS) y está relacionada con las malas condiciones higiénicas. Hace 10 años, Zimbabue sufrió su peor brote de cólera, que ocasionó la muerte de 4.000 personas y la infección de otras 40.000.