La langue española no deja de ganar importancia en Estados Unidos. Según el anuario El español en el mundo 2018,  elaborado por el Instituto Cervantes, más de 42,1 millones de personas en el país norteamericano hablan español a nivel nativo. Esta cifra asciende a 58,2 millones, el 18% de la población, si se suman las personas con comprensión limitada. Por ende, uno de cada cinco habitantes tiene la capacidad de hablarlo o entenderlo.

EE.UU., además, es el cuarto país con más hispanohablantes, por detrás de México, Colombia y España. Este idioma es el segundo más hablado en 43 de sus 50 estados, según datos de la Oficina del Censo de los Estados Unidos de 2017 recogidos por Verne.

El español también es la lengua más estudiada en las escuelas públicas del país norteamericano, con más de 8,1 millones de alumnos, de acuerdo al Instituto Cervantes. Se estima que en 2060, será el segundo con más hispanoparlantes: 119 millones de persona, solo por detrás de México.

Esta ebullición del castellano en  Estados Unidos abre una vía clara a la promoción turística. Y es que otorga a España una capacidad mayor para atraer turistas de una de las mayores economías del mundo, que han demostrado realizar un gasto diario mayor que los viajeros procedentes de otros mercados emisores más tradicionales como Reino Unido y Alemania. Segmentos como el turismo idiomático podrían verse especialmente beneficiados por este fenómeno.