“Miles y miles” de reclamaciones falsas por enfermedad durante las vacaciones podrían afectar a la industria en los próximos años, así lo cree Peter Kearns, director ejecutivo del touroperador especializado en Egipto Red Sea Holidays.

Según explica a TTG, pese a que se ha producido un descenso significativo de las demandas fraudulentas de viajeros británicos que aseguran haber estado enfermos durante sus vacaciones debido al mal estado de la comida del hotel,  este problema no ha desaparecido.

Y es que tal y como advierte el directivo, pese a que las nuevas denuncias se han reducido considerablemente, el período de prescripción para realizar una reclamación es de tres años , por lo que se podría producir una avalancha de reclamaciones de años anteriores, dejando al sector de viajes vulnerable. Kearns explica que Red Sea Holidays tuvo que contratar su propio equipo legal interno llegando a tener “más personal que se ocupaba de las reclamaciones legales  que de vender vacaciones”.

Esta misma idea es refrendada por Matt Gatenby, socio de la firma legal Travlaw: "Ahora estamos tres años después del período pico de reclamaciones (verano 2015-16) y los abogados con un retraso en su gestión pueden apresurarse a presentarlos antes de la fecha límite".

Desde el año 2013, este tipo de reclamaciones se incrementaron un 500% llevando a la industria vacacional a una situación límite. El gobierno británico tomó diferentes medidas con el objetivo de disuadir a los defraudadores y a las firmas de abogados (claim farmers) que les alientan a presentar las demandas. Una de las acciones más efectivas fue la fijación de un coste fijo para este tipo de reclamaciones y limitando el monto de los costos legales que podían percibir los abogados.