Desde hace dos semanas, todos los viajeros que regresan a Alemania desde países considerados de riesgo por Covid-19 están obligados a cumplimentar un formulario, sin embargo, la fiabilidad de estos documentos es más que cuestionable.

Según recoge SPIEGEL, la policía federal ha informado que ha encontrado inconsistencias en 2.985 formularios de los 15.147 comprobados en los controles aleatorios realizados en los principales aeropuertos del país, lo que supone casi el 20%.

Los viajeros tienden a inventarse los nombres —identificándose incluso como ‘Pato Donald’—, o anotando direcciones y números de teléfono incorrectos. Desde la Policía critican, además, que no tienen acceso a las bases de datos electrónicas para contrastar la veracidad de la información y solo pueden compararla con los pasaportes.

La información recogida en los formularios es clave con el fin de poder localizar a los pasajeros y hacer seguimiento de que cumplan con la cuarentena obligatoria. Incumplir dicha normativa puede traducirse en multas severas de hasta 25.000 euros.