El 35% de las Viviendas de Protección Oficial (VPO) ubicadas en los barrios de Can Misses, Platja d´en Bossa y Puig d´en Valls (Ibiza) están siendo alquiladas a personas diferentes a las que obtuvieron estas casas. Incluso, algunas de ellas han sido arrendadas como pisos turísticos, lo que supone una infracción muy grave.

Según ha informado Diario de Ibiza, la campaña de inspecciones que efectuó el Istituto Balear de Vivienda (Ibavi) en estas localidades se ha saldado con 14 expedientes abiertos, seis de ellos de carácter sancionador. En total se investigaron 40 pisos. 

Asimismo, la ley prevé, de forma excepcional, que el dueño de una VPO pueda arrendar su casa, siempre y cuando solicite, previamente, una autorización al Ibavi. Cuando no es así, el alquiler de una VPO está considerado una infracción grave, con multas que van desde los 3.000 a los 30.000 euros. El alquiler de las mismas como pisos turísticos, supone una infracción muy grave, con sanciones que oscilan entre los 30.000 y 50.000 euros. En el caso de que se volviera a cometer esta falta, podría retirarse la propiedad del inmueble. 

Esta campaña, además, responde a la nueva Ley de Vivienda, en vigor desde el pasado junio, que tiene previsto realizar nuevas inspecciones con un equipo de 24 personas dedicadas de forma exclusiva a esta actividad en todo el archipiélago balear.