El Ayuntamiento de Torremolinos (Costa del Sol) quiere evitar el exceso de terrazas, por lo que ha aprobado la reforma de la ordenanza que regula la instalación de sillas, toldos, mesas y carteles o luminosos en la vía pública. La infracción de la norma conlleva multas de entre 750 y 3.000 euros

Según ha informado Sur, la delimitación de los espacios de la vía pública, destinada a las terrazas, afecta principalmente a las zonas del centro y especialmente a las áreas recientemente peatonalizadas, como son la plaza Costa del Sol y la avenida Palma de Mallorca.

En dichas zonas, declaradas singulares, el mobiliario de las terrazas debe tener una “especial calidad, con características homogéneas”, es decir las mesas deben “ir a juego con las sillas”. Asimismo, no se permitirá cualquier color, sino aquellos que oscilan entre el blanco roto o crudo hasta el rosa salmón, verde pistacho o celeste.

A su vez, el mobiliario podrá ocupar, como máximo, el 50% del ancho de la calle y debe dejar un espacio mínimo de dos metros a los peatones. En las aceras de menos de dos metros no se podrán habilitar terrazas, mientras que los locales de restauración o comercios no podrán exceder el 25% del ancho de la calle, contando desde la fachada.

Las terrazas, al mismo tiempo, deberán respetar las paradas de transporte público, las zonas de carga y descarga y los aparcamientos para Personas con Movilidad Reducida (PMR), con al menos dos metros de distancia. La distancia debe ser de 1,5 metros para los pasos de peatones y de un metro para los bordillos de la acera con calzada. 

La Asociación de Comerciantes y Empresarios de Torremolinos (ACET) ha presentado diferentes alegaciones, así como propuso varios cambios en la Mesa del Comercio del Consistorio. Su presidente, Juan Vallejo, reparó en que "habrá que negociar caso por caso, porque hay locales que tienen farolas o fuentes cerca".