Miguel Fluxá, presidente de Iberostar Hotels & Resorts, con sede en Palma (Mallorca), hizo balance sobre la situación turística actual en el III Foro de El Económico. Fluxá consideró que el sector está atravesando una “pequeña crisis”, debido a la recuperación de Egipto y Turquía que “ofrecen precios muy competitivos”.
Según ha informado Última Hora, el presidente de Iberostar abogó por “mantener la calidad” en la oferta hotelera de las Islas Baleares, ya que de lo contrario “llegan las quejas”. En esta línea, apostó por ponerle freno a los descuentos y puso en valor la “solidez” empresarial del archipiélago.
Fluxá también tuvo palabras para la incertidumbre generada por el Brexit, que afecta especialmente a las familias británicas, así como para la influencia política de Trump. Sin embargo, el tema que acaparó más la atención en la entrevista, fue el relevo generacional del grupo, que tiene como vicepresidentas a las hijas de Fluxá, Sabina y Gloria.
Las actuales vicepresidentas, quienes se encargan de la gestión del grupo (120 hoteles en 19 países), entraron en compañía en 2005, tras finalizar sus estudios. Entonces, pasaron por los todos los departamentos de la compañía para conocerla en profundidad. Los tres, padre e hijas, admitieron que, pese a que había diferencia entre ellos, los puntos en común son mayores y que sus diferencias les sirven para complementarse.
El presidente y las vicepresidentas de Iberostar coincidieron en su afán por “transmitir los valores heredados” a todo su equipo, conformado por 32.000 personas de más de 80 nacionalidades.
