La hotelera de lujo catalana Mercer Hoteles ha renunciado a abrir un hotel de cinco estrellas en pleno corazón de Córdoba. Al menos por el momento.

Desde la compañía han anunciado que desisten en su intento de reformar el emblemático palacete del siglo XIX ubicado en la calle Julio Romero de Torres a escasos metros de distancia de la Mezquita-Catedral.

Pedro Molina, director general y dueño de Mercer Hoteles, ha explicado a ABC que paralizan el proyecto: “He desestimado hacerlo hasta que cambie el gobierno local o presentemos un contencioso judicial en defensa de nuestros intereses”. Ha estallado tras la última modificación exigida por la Gerencia de Urbanismo de la ciudad califal: “La última propuesta suya es que haga una pensión y yo no hago eso; hago hoteles de lujo”.

El planteamiento de Urbanismo pide que en la planta baja, además del acceso a clientes y un ascensor, se ubiquen las máquinas, el aire acondicionado o el sistema de agua caliente, y no en el sótano como estaba proyectado. Esta maquinaria robaría el espacio al bar, la cocina y el restaurante que son requisitos imprescindibles para obtener la categoría de cinco estrellas.

Molina critica todas las trabas a las que se ha enfrentado este proyecto que inició en 2005, año en que la hotelera compró el edifico. Incide en que tras haber accedido a reducir el tamaño de 18 a 12 habitaciones y de haber obtenido el visto bueno del Pleno del Ayuntamiento para la modificación del Plan del Casco que permitiese su uso alojativo, siguen enfrentándose a  impedimentos.

Mercer Hoteles cuenta actualmente con dos hoteles de lujo en las ciudades de Barcelona y Sevilla, y un hotel en Vilafranca del Penedés. En proyección, además del citado hotel de Córdoba, están otros hoteles en La Cerdanya (Girona),  San Sebastián y Alella (Barcelona).