La figura del aprendiz está volviéndose a imponer como tendencia con el fin de evitar que se cierren más negocios. La UPTA (Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos) ha presentado al gobierno un plan de relevo generacional que trata de dar salida a jóvenes en paro que ni estudian ni trabajan. De esta manera, podrán quedarse con un negocio, ya sea un bar, una casa rural o un taxi, una vez el propietario se jubile. Aunque no de cualquier forma.
En primer lugar, se llevarán a cabo encuentros entre autónomos que quieran jubilarse y jóvenes emprendedores, en especial los inscritos en Estrategia de Emprendimiento Joven. Una vez establecida la conexión el aprendiz practicará durante los dos últimos años de la vida laboral del dueño todo lo necesario para convertirse en un buen profesional.
Desde UPTA prevén que la medida podría salvar unos 10.000 negocios al año lo que “significaría garantizar ingresos en la Seguridad Social, los impuestos directos e indirectos, además de un esfuerzo menor de futuras inversiones para conseguir incorporar al mercado de trabajo a personas que o bien ya no son admitidas o aún no han comenzado”.
El secretario general de la organización, Eduardo Abad Sabaris, ha señalado que la burbuja del emprendimiento es una realidad que nadie puede cuestionar. En 2016 se dieron de alta 700.000 nuevos autónomos de los que 680.000 desaparecieron, algo que demuestra que “a pesar de los grandes esfuerzos que la Administración viene desarrollando para el fomento del autoempleo” los ingresos son “casi imperceptibles”. La tarifa plana no ha servido para que crezca de manera exponencial el RETA.
También la Federación Nacional de Trabajadores Autónomos (ATA) promueve el relevo generacional buscando empresarios que busquen a alguien que garantice la continuidad del negocio. ATA y UPTA opinan que la nueva ley de autónomos debería tener un plan de bonificaciones a este tipo de contrataciones. Asimismo, proponen que la creación de un ‘colchón social’ para autónomos con reducciones de cuota a la Seguridad Social.
