Room Mate Hotels, la cadena fundada y presidida por el empresario Kike Sarasola, cerró el pasado ejercicio con 101,8 millones de ingresos, lo que supone un incremento interanual del 23%. El beneficio antes de impuestos (ebitda) fue de 5,1 millones, un 55% más.

Según ha informado El Confidencial, la facturación del grupo es aún mayor, de 107,6 millones, si se tiene en cuenta el rendimiento de su filial de apartamentos Be Mate, que ingresó 5,8 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 35%. 

La estrategia del grupo de cara a los próximos dos años, pasa por duplicar el tamaño de la cadena, así como por aterrizar en nuevos mercados. Así, ya ha firmado 10 nuevos establecimientos, que se inaugurarán en un plazo de año y medio, ubicados en Madrid, Mallorca, Las Palmas de Gran Canaria, Málaga y San Sebastián. 

A nivel internacional, irrumpirá en Lisboa este año y en Oporto en 2021. El próximo febrero, asimismo, abrirá un hotel en Roma, mientras que en septiembre relanzará otro. En París, por su parte, abrirá otro establecimiento dentro de 20 meses. Con todas estas aperturas, el portafolio de la hotelera pasará de 26 a 36 activos. 

Al mismo tiempo, Room Mate está en negociaciones para cerrar otros 10 proyectos, por los que podría aumentar sus habitaciones de 1.900 a 4.700 en tres años y que además supondría su desembarco en la Costa Azul. Y es que podría hacerse con su primer hotel en Mónaco. 

Be Mate, por su parte, inaugurará 16 alojamientos en los próximos 18 meses en países como México, Italia y España, con los que esera ingresar 10 millones de euros en 2020.