La dirección general de Consumo del Gobierno de Baleares ha multado a Iberia con una cifra récord: 448.000 euros por aplicar una cláusula abusiva, conocida como no show, que anula el trayecto de vuelta si el pasajero no ha efectuado el de ida, aun habiendo pagado ambos.

Según ha informado ABC, Consumo decidió abrir el expediente, que ha finalizado en multa, a partir de siete reclamaciones de usuarios de los años 2015-2017, que provocaron la intervención del Servicio de Inspección. Precisamente, este servicio descubrió en el apartado de condiciones generales del contrato, en la web de la compañía, la cláusula no show. La sanción, que ya ha sido recurrida por la aerolínea, es la más alta que ha interpuesto Consumo de Baleares.

El Govern balear ha tildado esta clásula de "muy grave" y ha resaltado que no solo vulnera una norma estatal y otra autonómica, sino que también ha sido declarada abusiva por el Tribunal Superior, el pasado noviembre, junto con otros dos requisitos de los billetes de Iberia, que son: aquel que autoriza a la aerolínea a modificar las condiciones del servicio contratado (compañía y escala) “en caso de necesidad” y el que exime a la compañía de responsabilidades en caso de la pérdida de un enlace.

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Pasajeros de Iberia Express | Foto: Público 

A su vez, el director general de Consumo, Xisco Dalmau, recordó que Iberia ya había cometido otras infracciones relacionadas con la vulneración de los derechos de los consumidores y había sido sancionado por este motivo, en los últimos tres años y en tres ocasiones, con 60.000 euros. La siguiente multa más cara que ha impuesto este organismo (340.000 euros) también fue a una aerolínea: Vueling, por los retrasos continuados que protagonizó en el verano de 2016. No obstante, la aerolínea con sede en Barcelona llevó esta resolución a la justicia ordinaria, por lo que aún no ha pagado dicha cantidad.

No obstante, Iberia no es la única compañía que aplica estas reglas en España. British Airways aplica las mismas condiciones de compra en sus vuelos combinados, aunque permite la opción de avisar y negociar cambios en el plan de viaje. Air France y KLM, por su parte, fueron demandadas en Bruselas por penalizar, con 125 euros en conexiones de corta distancia y hasta 3.000 en las de largo radio, a los pasajeros que no se presentaban al vuelo y no podían justificarlo.

A su vez, las aerolíneas del grupo Lufthansa (Swiss International Air Lines, Lufthansa, Austrian Airlines y Eurowings) penalizan a los pasajeros que no se presentan en el vuelo de ida. La única excepción es Brussels Airlines que permite volar de vuelta en caso de que se avise 24 horas antes del primer embarque.