La aerolínea británica easyJet espera cerrar el año con 482 millones de euros de beneficios, lo que supone un 8% menos que en el anterior ejercicio fiscal, cuando registró 523 millones. No obstante, estas previsiones se sitúan en la franja alta de las estimaciones originales.
Según ha informado Expansión, la ‘low-cost’ aseguró que su situación comercial continúa siendo fuerte en el cuarto trimestre. También, que el número anual de pasajeros ha crecido un 8,6%, hasta alcanzar los 96 millones de viajeros, fruto del aumento de la capacidad de un 10,3%, hasta los 105 millones de plazas.
Por otro lado, se estima un descenso del 2,7% de los ingresos totales por asiento a tipo de cambio constante al finalizar el año fiscal. No obstante, se espera que crezcan alrededor de un 0,8% en la segunda mitad del año, rompiendo así con la tendencia ligeramente negativa anunciado en un principio. Este incremento, de acuerdo con la aerolínea, se debe “tanto iniciativas propias como eventos externos que han motivado una mayor demanda, como las huelgas en British Airways y Ryanair”.
Los costes totales, por su parte, se dispararán cerca de un 12% a consecuencia del aumento de la capacidad, de la subida del precio del combustible y los movimientos en el tipo de cambio. Sin embargo, el coste por asiento se reducirá alrededor del 0,8%. El coste del combustible durante el año fiscal 2019, por su parte, se cifra en unos 1.420 millones de libras.
A este respecto, el consejero delegado de easyJet, Johan Lundgren, señaló que la compañía “ha continuado operando en línea con las expectativas marcadas, pese a la difícil situación del mercado”. “Las iniciativas que hemos implementado en el cuarto trimestre para optimizar nuestro rendimiento han conllevado una evolución de los ingresos sólida, con ingresos por asiento a un tipo de cambio constante en la segunda mitad del año que apuntan a un incremento hasta el final del mismo”, agregó.
