Según el ministerio de salud de Puerto Rico, la epidemia del virus del Zika que afectó a locales y turistas en 2016 ha llegado a su fin.

De hecho, únicamente 10 casos han sido denunciados desde abril de 2017, frente a los más de 8.000 que se denunciaron el pasado 2016. Sin embargo y a pesar de la buena noticia, desde las autoridades del país afirman que “no pueden bajar la guardia”. De hecho, el control y la vigilancia continuarán, para evitar que pueda existir otro brote.

Una medida que está siendo apoyada por los centros de control de epidemias y enfermedades de Estados Unidos, país vecino de Puerto de Rico, y que sigue manteniendo su nivel de alerta para evitar posibles casos.

El virus del Zika, que llega a los humanos a través de la picadura de un mosquito y por vía sexual, es una gran preocupación para mujeres embarazadas, por las devastadoras consecuencias que puede tener en el feto.