Algunos adictos a las nuevas tecnología no son capaces de desconectarse ni cuando viajan al destino de sus sueños. Un paseo en góndola por la bella Venecia puede desperdiciarse cuando los turistas van más pendientes de sus smartphones que de los canales.

Un vídeo, publicado por la italiana Maria Balich en la página de Facebook ‘Venecia ayer y hoy’, y recogido por distintos medios italianos, se escucha a un gondolero comentar que “el paseo es fantástico y los clientes están contentos; están disfrutando de la belleza de la ciudad; la aprecian mucho, hacen fotos y creo que volverán pronto a esta maravillosa ciudad”.

La grabación muestra a cuatro hombres viajando en la embarcación, mientras miran el móvil abstraídos y silenciosos, ajenos a las vistas y al movimiento. El gondolero ironiza en voz alta, pero ellos siguen metidos en su pantalla. 

El debate se desató y muchos venecianos, indignados, culparon a los turistas y los tacharon de incultos por visitar la ciudad y presumir de que han venido y han paseado en góndola; otros, arremetieron contra las tecnologías, argumentando que no son ignorantes sino “productos de nuestra sociedad”. “Ahora la gente es esclava del smartphone, italianos, chinos, americanos”. Los más benevolentes, disculparon todo diciendo: “lo siento, pero no estoy de acuerdo con que la "gran mayoría" no aprecie Venecia”. 

Con medios tecnológicos o sin ellos, lo cierto es que casi 40 millones de personas visitan cada año la popular ciudad italiana. Los efectos de la masificación han empezado a notarse en el estado de los canales y los lugares más emblemáticos. Por esa razón, algunos medios han publicado que el gobierno local regulará el acceso a la Plaza de San Marcos a partir de 2018.