Muchos estados del país norteamericano donde el consumo recreativo de cannabis es legal están barajando la posibilidad de potenciar el ‘turismo de marihuana’. Un ejemplo de ello es la ciudad de Seattle (en el estado de Washington), donde David Blandford, vicepresidente de comunicaciones de su órgano de promoción turística asegura que "como un mercado que se pueden desarrollar, están pendientes para formar parte de él”.No obstante, este tipo de turismo es una opción difícil ya que la legislación que permite el consumo de estas drogas es propia de cada estado y nadie ha probado a realizar promoción turística para atraer visitantes mediante la marihuana, debido entre otros motivos, a la gran oposición del gobierno federal. El vecino estado de Oregón también está barajando esta opción. Si bien admiten que el cannabis legalizado no es el principal motivo de la visita, sí que es cierto que se ha convertido en un factor más de atracción, como la cata de vinos.