Uno intenta no hacer mucho ruido, pero a veces es inevitable… Disiento totalmente de lo que se expone en el artículo "Demoler el Hotel Oliva Beach me parece una auténtica atrocidad”, publicado por José María Barrientos en este mismo diario.
Comenzaré diciendo que, por supuesto, la parte privada y la pública deben llegar a un acuerdo sobre la reubicación de los tres complejos mencionados, a fin de que el impacto económico y laboral sea el mínimo para la isla de Fuerteventura.
Pero no se puede pasar por alto el daño que estos tres edificios están haciendo en el ecosistema del Parque Natural de las Dunas de Corralejo, declarado como lugar de importancia comunitaria y perteneciente a la Red Natura 2000, zona de especial conservación y de especial protección para las aves.
Estos tres edificios, que llevan casi 50 años en esa ubicación gracias a intercambios —por no decir chanchullos— de políticos y sector privado —"si me das Lobos, te amplío la concesión; también te dejo hacer una remodelación, pero si no aumentas el volumen”."Lo acepto, pero de paso añado una planta, un spa, una piscina, un jacuzzi y techo el acceso, y también vendo a particulares algunos apartamentos ubicados en un suelo que no es mío"— interrumpen la llegada de sedimentos a las dunas, poniendo en claro peligro a la flora y a la fauna del entorno.
Hay mucho espacio en Fuerteventura donde reubicar los hoteles. Se hicieron acuerdos y se saltaron a la torera y, tras casi 20 años de avisos de orden de derrumbe, ahora nos quieren vender que arruinarán a la isla si estos se llevan a cabo. No, señores. La isla recuperará y conservará uno de sus entornos de más alto valor, y será cosa de ustedes buscar una alternativa que no destruya parajes y vida. A estas alturas, ya todos deberíamos estar a favor de la calidad por encima de la cantidad, y sin Dunas, nos destruímos uno de los principales recursos turísticos del norte de Fuerteventura.
*Jesús Vázquez es director de hotel con 20 años de experiencia en el sector, pero se define, ante todo, como un ser humano empático y justo