En octubre de 2016, el Aeropuerto de Bruselas (Bélgica) decidió instalar nuevas charity box en su terminal. Se trata de urnas que invitan a los pasajeros a donar dinero a diferentes entidades caritativas asociadas. En este caso, el aeropuerto belga cuenta con cuatro socios: Cruz Roja, UNICEF, Aldeas Infantiles y WWF.

Desde Brussels Airport Company destacaron en su momento que el nuevo diseño de estos receptáculos “atraía más la atención” no sólo por estar dispuestos en otra posición, sino por su aspecto. Sin embargo, la apuesta por lo llamativo puede haber resultado demasiado arriesgada. Y es que parece que en una competición de popularidad, un oso panda es capaz de imponerse a las imágenes de niños sonrientes o así lo parece al echar un vistazo a las urnas de donativos.

Uno de los últimos en darse cuenta de la preferencia de los viajeros por donar al Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF en sus siglas en inglés) que a las ONGs que le acompañan fue Ángel Ortiz Dávila, periodista y director del diario El Norte de Castilla, que recientemente visitó el aeródromo belga.

En un tuit comentaba que “un panda despierta más el sentimiento de solidaridad que los niños o la Cruz Roja”, aunque dejó abierta la posibilidad de que podían haber vaciado recientemente las huchas menos llenas.

No es la primera vez que uno de los pasajeros repara en este hecho. En septiembre de 2017, Pierre-Nicolas Schwab, doctor en marketing, se percató de que la de los pandas (la urna de la ONG WWF) estaba más llena que las demás y aprovechó la oportunidad para citar al Aeropuerto de Bruselas y preguntar "si estaban llevando a cabo una competición para comprobar quién recauda más".

Esta observación tuvo respuesta por parte de los responsables de las relaciones a través de las redes sociales del Aeropuerto de Charleroi, que explicaron que no se trata de ningún tipo de competición o de test "para comprobar cuál tiene más", sino que es una acción junto a estos cuatro socios para dar la oportunidad a los pasajeros de donar si así lo desean. Asimismo, afirmaron que tras preguntar a los responsables de WWF, comprobaron que vacían la urna con menos frecuencia que las de las otras tres entidades.