La red de alta velocidad alemana en manos de la compañía de ferrocarriles Deutsche Bahn se ha encontrado un nuevo obstáculo para su culminación. Las obras para la conexión entre las ciudades de Ulm y Stuttgart llevan año y medio paralizadas puesto que se trata del hábitat de dos especies de lagartijas en vías de extinción.

En concreto, el área afectada es la localidad de Wendlingen, en la que estaba prevista la construcción de un túnel. Ahora, los responsables de este proyecto, que debería estar listo en 2021, deberán cazar a todos los ejemplares –más de 10.000- y trasladarlos a un nuevo entorno.

Las especies en cuestión son la lagartija roquera (podarcis muralis) y el lagarto ágil (lacerta agilis) y su existencia está protegida por leyes destinadas a impedir su extinción. Así, la Deutsche Bahn tendrá que reasentarlas durante el próximo verano, un proceso que supondrá un coste de 15 millones de euros.