El negociador jefe de la Unión Europea con Reino Unido y ex ministro francés Michel Bernier ha dado una mala noticia a los propietarios de animales de Reino Unido: "Tienen que saber que al dejar la Unión Europea, se les acabó llevar al perro a España de vacaciones como hasta ahora". 

Y es que al abandonar la UE, los animales de compañía británicos tendrán que renunciar a su 'pasaporte europeo' que reduce el número de requisitos exigidos a la hora de viajar (solamente se exige microchip, vacunación válida contra la rabia con un período de espera de 21 días antes y después del viaje). Ahora tendrían que cumplir requisitos adicionales como análisis de sangre en laboratorios autorizados por la Unión Europea y otros tipos de vacunaciones.

Jean-Claude Juncker, presidente de la Comisión Europea, ha explicado que "hay unos 250.000 perros y gatos que cruzan todos los años la frontera de Reino Unido hacia la Unión Europea, sobre todo hacia España" y que se precisa de una solución técnica para esta cuestión. Aunque no es la consecuencia más nefasta del Brexit, en Bruselas la ponen como ejemplo del error que supone la decisión de abandonar la unión. 

Por su parte, Joseph Muscat, primer ministro de Malta y presidente de turno de la Unión Europa ha señalado que aunque no se trata de penalizar al país  "hay que dejar claro que la mejor alternativa habría sido seguir en la UE".