Tecniberia, patronal de las grandes firmas de ingeniería de España, y Fidex, la otra gran asociación del sector, están en guerra con las Administraciones Públicas para acabar con las subastas electrónicas que permiten que las ofertas que se presentan incurran en la baja temeraria a la hora de adjudicar proyectos de infraestructuras. Los profesionales denuncian que Aena las utiliza para esquivar la nueva directiva europea que modifica la Ley de Contratos del Estado y premia la calidad de los proyectos por encima del precio. En concreto, los ingenieros han estallado ante los últimos concursos para el diseño interior de las nuevas zonas de embarque del Aeropuerto de Girona-Costa Brava, presupuestado en 1.000 euros y con un plazo de ejecución de tres meses; y el proyecto de adecuación general de plataforma en el aeropuerto Tenerife Sur, presupuestado en 1,9 millones de euros y con un plazo de ejecución de 39 meses, que terminó siendo adjudicado con una baja del 53%