La implantación de estrategias que mejoren la cuenta de resultados no es una acción que sólo busquen cafeterías o restaurantes, es una constante que preocupa también al sector del alojamiento y en particular a los hoteles.

Raro es no percatarse de diferencias en las ofertas y servicios que se ofrecen en las cafeterías y restaurantes de los hoteles con respecto a locales fuera de estos.

Por lo general, estos espacios de los hoteles no parecen estar vivos, suelen generar sensaciones poco cálidas, parecen estancias frías que no invitan a estar en ellas ni a consumir, creándose una  espiral causa/efecto negativa continua.

Habrá que modificar esa percepción que influye en la cuenta de resultados, y para ello deberíamos implantar cambios en la gestión y servicio para impulsar estos  departamentos que son la antesala y escaparate de servicios de restaurante y banquetes que revitalizan esta parte fundamental para complementar con más aceptación el servicio de alojamiento y aumentar así la cuenta de resultados.

Otra característica común que se repite en las cafeterías de hoteles es que su clientela se suele basar tan solo en los huéspedes del hotel, aquellos que están alojados en sus habitaciones. No parece ocurrir la posibilidad de atraer público del exterior, que aún sin estar alojado, pueda disfrutar y conocer parte del hotel con la esperanza de que ese conocimiento a su vez potencie las ventas de alojamientos en sus habitaciones.

Así, se cumpliría la máxima: "Se desea lo que se conoce, lo que no se conoce no genera interés”.

Cuestión reseñable es que gran parte de los viajeros que se alojan en hoteles busca también encontrar características peculiares de la zona o del país, en términos gastronómicos, y localizan más fácilmente este tipo de alimentos y ofertas en locales fuera de los hoteles, por lo que no sería descabellado informar y ofrecer además ese tipo de gastronomía autóctona.

Por poner un ejemplo, es curioso que en España son muy pocos los establecimientos hoteleros que disponen de una oferta de nuestra cocina tan afamada y demandada como son las tapas y los aperitivos. 

Aunque no ocurre en todos los establecimientos hoteleros, ¿por qué no se suelen exponer géneros en las cafeterías ni en vitrinas o expositores? ¿Se piensa erróneamente que es suficiente con la existencia de cartas informativas? Pues No, grave error: la prudencia de disminuir costos se contrapone y mucho a la sensatez de  mostrar para vender.

Repito: "Se desea lo que se conoce, lo que no se conoce no genera interés”. Es en las experiencias y sensaciones donde radica la diferencia. 

Cuatro de los cambios que están demostrando resultados más positivos son:

  • Nuevo enfoque hacia  la dinamización de clientes.
  • Actualización y adecuación a las tendencias y tiempos actuales.
  • Renovación, mejoras y cambios en presentaciones culinarias y sus formas, incluyendo un mayor número de Ofertas de raciones y tapas.
  •  Marketing de captación de nuevos clientes de cafetería en el entorno más cercano.