El nuevo Palacio de Congresos de Palma consolidará la capital balear como destino MICE en España. Un producto que complementa la oferta de turismo urbano con la ciudad mediterránea quiere promocionarse los 365 días del año. Estas ideas han expresado hoy en Fitur el alcalde de Palma, José Hila, y el Vicepresidente y Gabriel Escarrer, Vicepresidente y Consejero Delegado de Meliá Hotels International, empresa adjudicataria del nuevo Palacio de Congresos y del hotel anexo, Meliá Palma Bay, en el marco de su comparecencia de prensa en Fitur.
 
Durante el acto, tanto Hila como Escarrer han destacado la idoneidad del Palacio de Congresos como complemento a la oferta urbana de la ciudad. “Palma es una ciudad abierta los 12 meses con una enorme variedad de atractivos turísticos”, ha explicado Hila, que ha señalado la oferta cultural o gastronómica como dos de los ejes sobre los que destaca la promoción de la ciudad. En este sentido destaca el 25 aniversario de la Fundación Joan y Pilar Miró, que se celebra este 2017, o la apertura al público en primavera de los Jardines Reales de Marivent. Asimismo, desde hace solo unas semanas, la ciudad cuenta con un nuevo restaurante con estrella Michelin, el Restaurante Adrián Quetglas del cocinero homónimo, y que se suma a otros cocineros galardonados en la ciudad como Marc Fosh o Andreu Genestra.
 
Por su parte, Escarrer ha destacado que esta oferta de turismo urbano supone un gran aliciente adicional para aquellos visitantes que acuden a la ciudad por trabajo o para asistir a algún congreso o feria. Y es que, según Escarrer, con la puesta en marcha de este proyecto, la capital balear se posiciona como un destino de referencia para el sector MICE,” pues tiene potencial para situarse entre las cincuenta mejores ciudades de congresos del mundo”. Según las previsiones, en los próximos cinco años se espera que el Palacio de Congresos acoja más de 300 eventos y emplee a unos 200 trabajadores. Infraestructuras, servicios, ubicación y diseño son los puntos fuertes de este edificio diseñado por el arquitecto Francisco Mangado.

Su localización, a cinco minutos en coche del puerto y del aeropuerto, a medio kilómetro del casco histórico de Palma y a 50 metros de la playa facilita el acceso a los usuarios desde cualquier punto. Entre sus instalaciones cuenta con dos auditóriums: el Principal, con espacio para 2.000 personas aproximadamente, y otro con capacidad para unas 500.  A esto se le suman cinco salas de reuniones, una sala vip, tres halls, aparcamiento, restaurante, cafetería y una terraza de 600 metros cuadrados con vistas a la Bahía de Palma. La oferta se complementa con un hotel de 268 habitaciones